Siendo sommelier apasionada por el mundo del vino, me complace llevarlos en un emocionante
viaje a través de las ricas y diversas variedades de uva que se cultivan en España. Desde las
majestuosas colinas de la Rioja hasta los soleados campos de la Ribera del Duero, España es el
hogar de algunas de las variedades de uva más fascinantes y exquisitas del mundo.
Acompáñenme mientras exploramos las características únicas de algunas de estas joyas
enológicas.
Tempranillo: La Joya de la Rioja
Comenzamos nuestro viaje con la reina indiscutible de la Rioja: la Tempranillo. Esta noble
variedad de uva es la columna vertebral de muchos de los vinos más famosos de España. Con
su distintivo perfil de sabor que combina notas de frutas rojas maduras, ciruelas, cuero y
vainilla, los vinos elaborados con Tempranillo ofrecen una experiencia sensorial inolvidable. La
Rioja Alta y la Rioja Alavesa son las regiones donde esta uva alcanza su máxima expresión,
gracias a su clima continental moderado y suelos arcillosos calcáreos.
Garnacha: El Tesoro del Mediterráneo
Descendemos hacia el cálido y soleado Mediterráneo para descubrir la exuberante Garnacha,
una variedad que prospera en climas secos y suelos pobres. Con su carácter afrutado y
especiado, los vinos de Garnacha seducen con notas de cerezas, moras, pimienta negra y
hierbas mediterráneas. Las regiones de Priorat y Campo de Borja son famosas por sus vinos de
Garnacha, que muestran una concentración y complejidad excepcionales, resultado del
intenso sol y los antiguos viñedos de suelos licorellos.
Albariño: El Reflejo del Atlántico en Galicia
Nuestro próximo destino nos lleva al fresco y verde norte de España, donde la uva Albariño
reina suprema. Originaria de la región de Rías Baixas en Galicia, esta variedad blanca produce
vinos vibrantes y aromáticos, con notas de cítricos, manzana verde, melocotón y un distintivo
toque salino. Los suelos graníticos y el clima atlántico de Rías Baixas crean las condiciones
perfectas para que la Albariño exprese toda su frescura y mineralidad, resultando en vinos
blancos elegantes y equilibrados.
Monastrell: La Fuerza del Levante Español
Nuestra última parada nos lleva al caluroso Levante español, donde la Monastrell es la
protagonista indiscutible. Conocida también como Mourvèdre en Francia, esta variedad tinta
produce vinos potentes y robustos, con una explosión de frutas negras maduras, especias y
notas terrosas. Las regiones de Jumilla y Yecla en la región de Murcia son el hogar de algunos
de los mejores ejemplos de vinos de Monastrell, donde el clima seco y los suelos calcáreos
proporcionan el entorno ideal para su cultivo.
Moscatel: La Dulce Fragancia de la Costa Mediterránea
Continuamos nuestro viaje hacia la costa mediterránea para descubrir la encantadora
Moscatel, una variedad conocida por su fragante aroma y su dulzura seductora. Con notas de
flores blancas, albaricoque, miel y especias, los vinos de Moscatel son un verdadero deleite
para los sentidos. La región de Málaga es famosa por sus vinos dulces elaborados con
Moscatel, donde el sol abundante y los suelos de pizarra contribuyen a su expresión única y
exuberante.
Bobal: El Tesoro Oculto de Valencia
Nuestra última parada nos lleva a la soleada región de Valencia, donde la Bobal ha estado
esperando ser descubierta. Esta variedad tinta autóctona ofrece vinos rústicos y llenos de
carácter, con notas de frutas rojas, hierbas silvestres y especias. Los viñedos viejos de Bobal en
las tierras altas de Requena y Utiel-Requena producen vinos con una sorprendente frescura y
estructura, que reflejan la pasión y el trabajo duro de los viticultores locales.
Las variedades de uva españolas ofrecen un abanico fascinante de perfiles de sabor y estilos de
vino, reflejando la diversidad de climas y paisajes de este hermoso país. Ya sea disfrutando de
un elegante Tempranillo de la Rioja o de un refrescante Albariño de Rías Baixas, cada copa nos
transporta a un emocionante viaje a través de los viñedos ibéricos, donde la pasión y la
tradición se unen para crear verdaderas obras maestras enológicas. ¡Salud!